Amor.

Él hará que eches de menos algo tan dulce como el dolor.

Sentirte, notarte, todo huele a ti, por todas partes-

En estos días no sale el sol, si no tu rostro, y en el silencio sordo del tiempo, gritan tus ojos.

Estas bien, vas con otra, me apeno y sonrió,
pues recuerdo las noches que temblaste en mi mano,
como tiembla la hoja a la humedad del roció,
o el fulgor de la estrella que desciende al pantano.
Te perdono, y es poco. Te perdono, y es todo,
yo que amaba tus formas, mas amaba tu amor,
y empezó siendo rosa lo que luego fue lodo,
a pesar del perfume y a pesar del color.
Hoy prefiero mil veces sonreír aunque pierda,
mientras pierda solo el derecho a tu abrazo,
y no ser el que olvida, mientras ella la que recuerda,
y tu bajes el rostro y ella lo vuelva si paso.
Quien te lleva no sabe que paso mi tormento,
y me apena su modo de aferrase a lo vano,
ella se aferra a la rosa, pero olvida que el viento,
todavía dirige su perfume a mi mano.

Y por ser quien conozco tus angustias y anhelos,

te perdono si pasas y no me saludas,

pues prefiero el orgullo de perderte con celos,

a la angustia que ella siente de tenerte con dudas.

Y mañana quien sabe, no sabre si fue rubia,

si blanca o canela la humedad de esta pena,

y quizás te recuerde si me adentro en la lluvia,

o tal vez me entre la risa si acaricio la arena.

Te has quedado en nada menos los días que he llorado entre los que no pensaste en mi.
Reconocelo,

ya no abra sonrisas que valgan.

¿Sabes? Cuando me decías eso de que el cielo era mio, que seguro que era capaz de subir al sitio mas alto a tirar un avión de papel, cuando me convertiste en la primera chica que rozo cada centímetro y conoció tu cama, cuando solías decir 'te quiero' con mas dulzura que miedo, lo creí de verdad. 

Seria porque lo decían tus labios, seria, seria porque seria. Pero yo misma lo he dicho SERIA ahora la realidad es que ya no creo nada.

Bueno, ahora me siento, a ver que te inventas ahora para tirarme de nuevo al suelo, pero te lo advierto; Esta vez no sera tan fácil.

Y es que ya sabes mucho de mi... tendré que matarte,